Haciendo playitas

Desde pequeño he sentido una extraña atracción por la Playa, de hecho gran parte de mis actividades recreativas las hago en este espacio. Sin embargo no soy de los que goza con el sol y con estar tirado en la arena, haciendo nada. Lo mió es la pichanga, lo mió es el buceo, lo mió es pasar mucho rato en las Olas, en fin. Lo mió nunca fue la taquilla playera.
El destino se encargo de poner a mi lado una hermosa mujer, de piel muy sensible y no asidua a estos lugares, pero quien por cariño me acompaña, pero solo hasta la orilla. Sin embargo el destino tambien me jugo una gran jugada, me envió a Lucas, quien al parecer heredo esta pasión y con quien comparto hasta no poder mas, nuestras jornadas playeras invernales y veraniegas. Porque para mi, la playa no es solo en verano.

Lamentablemente hoy estoy un poco alejado de la costa, pero la pasión la mantengo muy vigente y Con Con en un buen lugar para gozarla.

Saludos y buenas olas para todos.

Pd: acotumbro no usar poleras en la playa, pero para no espantar a nadie de este sitio opte por esta foto.

Mi querido Abuelo

El lunes nueve de Enero, recien pasado, recordamos a mi abuelo. Han pasado dos años desde que nos dejo pero su recuerdo y su particular forma de ser nos siguen acompañando. No existe reunión familiar en la que no nos acordemos de mi viejo, de sus bromas pesada, de sus historias con los cabros de Valparaíso, de su caballazos en la micro y de sus incomparables relatos de juventud, epoca en la cual recorría el puerto en duras travesías acuáticas, bueno como no hacerlo, si mi tata siempre fue un gran pez.
Como casi todos los mortales, sus pecados no pasaron en vano, sobretodo para sus hijos, pero para mi fue siempre un buen abuelo, cariñoso, orgulloso de sus nietos y uno mas del grupo cuando me juntaba con mis amigos, algunos aun lo recuerdan, y no puedo negar la alegría que siento cuando lo hacen.
Mi viejo, ese niño de puerto que supo del trabajo a temprana edad y que forjo su personalidad en los callejones continuos a la plaza Echaurren. Mi tata conscripto del Maipo, Presidente del DPA, Arbitró de Fortín Prat Músico del Rapirapeto y por sobre todo, voz y figura del coro de la iglesia La Matriz.
Mi tata ya no nos acompaña físicamente, pero para mi siempre estará presente.
Te quiero mucho viejo y seguramente donde estés, tendrás a todos escuchando tus historias y animando sus fiestas.

Sacando las cuentas del 2005

2005 un año que no olvidare, en lo profesional partió bastante lento, pero a mediados de años tomo un impulso realmente insospechado, que trajo grandes cambios a mi vida, entre los cuales destacan el cambio de ciudad, cambio de responsabilidades, cambio de empresa, cambio de una cómoda estabilidad en mi querida viña del mar a una estresante actividad en la capital. He tenido que dejar de lado varias cosas, pero bueno, el desafió era grande y acá estamos poniéndole el hombre.
En lo personal creo fue un gran año, siento que mi relación con Maitte se consolida cada día. Particularmente creo que las parejas están en una constante evolución y consolidar un proyecto de vida es difícil y a muy largo plazo.
Lucas, mi hijo cada día mas grande y bueno… podría escribir mil historias de él. Simplemente lo amo… lejos mi gran motivación.
Esperamos con Maitte conocer este 2006 a Nicanor o Aurora, es nuestro proyecto.
Pena, por los que partieron y por aquellos problemas de mis padres aun sin solución.
Alegrías, tantas que seria un apartado a este relato.
Políticamente, nada, solo espero que gane la Michelle.
Amigos los de siempre y los nuevos fueron bienvenidos a nuestras vidas.
Reconozco que de un tiempo a esta fecha me puse llorón. No se porque, pero frecuentemente se me aprieta el pecho, herencia genética de mi padre y de mi gran abuelo, a quién por estos días recordamos mas que nunca.

En fin el balance es positivo.

Gracias 2005 y a todos aquellos que se dieron el tiempo y la lata de compartir parte de sus vidas con este hombre que sueña con volver a vivir cerca del mar.

Feliz 2006